-Buenos días Selene
-Buenos días señor Morado
-Sientate charlemos un rato
-Gracias vengo sola, hoy me levante
muy temprano para verlo.
-¿Como te sientes hoy?
-Bien, he estado tomando mi prozac
y mi litio a la hora, me siento tranquila y feliz.
-Me alegra mucho, aunque... te veo
mas delgada, ¿has estado comiendo bien?
-Si, como 5 veces al dia, todo tipo
de cosas, la vida es completamente maravillosa y me siento muy fuerte, de hecho
pienso que he subido de peso, me siento gorda y me preocupa no poder entrar en
los vestidos de mi próximo desfile.
-... Entiendo Selene ¿Cuando tienes
tu desfile?
-En 2 semanas, tiene que ir señor
morado, lleve a su esposa y a sus hijas, lo invito.
-Claro que si Selene, ahí estaré
sin falta. He visto tu pagina web, has estado inactiva últimamente, ¿puedes
decirme por que?
-¿Quiere que le diga la verdad
señor Morado?
-Naturalmente
-No lo recuerdo...
-¿Como es eso?
-No recordaba que tenia una pagina
web, así como no recordaba que usted no tiene hijas sino hijos, ¿porque no me
corrigió cuando se lo dije?
-No recuerdo que me hayas dicho eso
Selene, o tal vez no lo escuche discúlpame.
-¿Sabe? A veces pienso que es usted
el que me esta enloqueciendo señor Morado.
-Selene deja de jugar con tu
cabello por favor te vas a quedar calva, y mírame cuando hablas
-Lo siento...
-¿Que estas pensando ahora?
-Que si usted sigue confundiéndome
como trata de hacerlo, voy a tener que matarlo para estar tranquila, y créame
que no quiero eso señor Morado, usted es un buen tipo, me cae muy bien, ademas
su esposa y sus hijos lo extrañarían, y debo confesarle que yo también... no
tendría con quien ser sincera sin que se rían de mi, y no es por nada, pero se
que si voy a confesarle mis pensamientos a un sacerdote, saldría corriendo de
la iglesia... ¿usted se imagina? seria graciosisimo, me lo imagino diciendo que
soy una bruja, hija de satanas, y me quemarian en la hoguera como en la
inquisición... no quisiera morir quemada, quiero morir junto a mi esposo y mis
hijos, ademas la ultima esperanza que tengo es usted, por favor señor Morado,
no me confunda mas.
-¿Selene que vestido tienes puesto
hoy?
-Parece que usted es daltónico
señor Morado, como puede ver estoy con un lindo vestido rojo.
-Selene, ¿estas consiente que tu
vestido es de color verde verdad?
-Señor Morado por favor, No me
confunda mas... ¿es esto un trofeo de tenis?
-Si, asi es, en mi juventud jugaba
tenis era muy bueno, ¿tu practicas algún deporte?
-Solo hago abdominales y
sentadillas en mi cuarto, nunca fui buena para los deportes en el colegio, ¿le
conté que en el colegio había una chica que me golpeaba, y me pego un chicle en
el pelo?
-No Selene, ¿porque no me lo
cuentas?
-Ella era muy fea y muy tonta, me miraba con una mezcla de admiración y odio, nunca pudo tener una buena pronunciación en la clase de ingles, siempre se
desquitaba conmigo, escribía cosas sobre mi en los baños, claro, en ese tiempo
no existían las redes sociales sino la boleteada hubiera sido peor, tuve que
golpearla ¿sabe? un día no me puse mi uniforme, y lleve mi vestido rojo al
colegio, todos me miraban como un bicho raro, terminaron expulsándome por eso.
-Debiste controlarte, no es bueno
golpear a la gente
-Lo se, debí haberla matado por
humillarme asi durante todo el año escolar, debieron haberla expulsado a ella
por tortura, porque le confieso señor, me gustaba estudiar, pero odiaba ir al colegio a que me golpeen, o se burlen de mi… tiene razón no debí hacerlo.
-Eres una buena persona Selene, no
te creo capaz de matar a nadie.
-¿Me esta retando señor Morado?
-No me malinterpretes... ¿Como
están tus hijos?
-La nena bien, creciendo mucho,
¿sabe? ella es muy bonita y aprende muy rápido, pinta sin salirse de la linea y
escribe su nombre y el mio, es algo tímida pero la amo... el niño me visita de
vez en cuando en las noches es bastante inquieto, sigue preguntándome el porque
no lo salve, solo le digo que no fue culpa mía si no de su padre, si no me
hubiera molido a palos el estaría aquí conmigo... en Agosto cumple años, y me
esta reclamando una fiesta como las de su hermana viva.
-¿Has sabido sobre las chicas que
te amenazaron?
-Una de ellas me pidió una
disculpa, pero las demás siguen inventando cosas sobre mi, quieren influir
sobre mi mejor amiga, y ella es muy débil mentalmente, creo que terminara
creyendo todo y me dejara como todos, en realidad no me preocupa ni me sorprende, a veces pienso que ellas se preocupan mas
por mi vida, que por la suya, pero no me inquieta señor Morado, solo espero el
día para poder reunirlas a todas y torturarlas hasta la muerte; no sin antes
haber revelado todos sus secretos, porque se que ellas son Feas, adictas,
alcohólicas, inseguras, y frustradas, son infieles con sus parejas, algunas son
prostitutas y ladronas, si eso haré... revelare sus secretos, las matare en vida y luego se las quitare.
-Tu no eres capaz de eso Selene,
eres muy noble, y tal vez eso es lo que te ha enfermado, tienes rencor contra ti
misma, guardas mucho odio y frustración por no haber cambiado las cosas cuando
tenias el poder, ¿pero sabes? eres joven, la vida sigue y aunque el pasado
duele, tienes un brillante futuro... mírate, eres muy inteligente, siempre lo
fuiste desde niña, eres muy bonita y eres una de las modelos mas importantes de
esta ciudad, ¿no te hace feliz eso?
-¿Quien lo entiende a usted señor
Morado? la sesión pasada me dijo que tenia que bajarle a mi ego, y ahora trata
de alimentarlo... ¿me quiere volver loca señor Morado?
-Selene dime la verdad, ¿tomaste tu
prozac hoy?
-Si señor, de hecho tome dos dosis,
y me siento mucho mejor.
-.... ven acá... Miremos cuanto pesas...
-Debo estar como una cerda, como
esas cerdas que quisieron matarme en vida! malditas inmundas, si las conociera señor morado, son horribles tanto su físico como su alma.
- ...Cuarenta y tres kilogramos,
has bajado cinco kilos desde tu pasada cita.
-No lo creo, usted debe estar
equivocado... me quiere volver loca señor morado.
-Selene, debo hospitalizarte, no
has hecho mas que decir rarezas durante esta sesión... nadie quiere volverte
loca, no estas loca, tienes una crisis maníaca, cuando te encuentres estable de
nuevo voy a dejarte ir a tu casa.
-Lo siento señor Morado, pero eso
no podrá ser posible.
-Y porque no?
-Mi esposo no puede quedarse solo en la casa, ¿sabe
porque? porque ya me engaño una vez y creo que si no estoy con el, haciéndolo
feliz seguramente volverá a engañarme, el es un buen tipo, la culpa fue mía,
tal vez no soy lo suficientemente mujer, aunque trato de hacerlo, nací para que
los hombres que amo me abandonen empezando por mi padre.
-Tu problema es que no buscas un hombre para compartir tu vida, sino a tu padre perdido en tu esposo. No quieres perder esa protección y ese cariño que te falto de niña.
-Desista de la
idea de hospitalizarme señor Morado, no me arriesgare a perderlo.
-No fue tu culpa Selene, eres una
gran mujer, deja de culparte y de sentirte insegura, recaíste en tu desorden
mental por eso, pero es mi trabajo el hacerte entender que no fue tu culpa.
Tendré que hospitalizarte por lo menos una semana Selene, sin excusas, confía
en ti y en la gran mujer que eres.
-El se ira con otra si me quedo
aquí señor Morado.
-Tu esposo no volverá a engañarte,
el te ama, y ten en cuenta que si lo hace, la culpa no sera tuya, y simplemente
es por que el no te merecía.
-Usted se contradice otra vez Señor
Morado, me dice que no me engañara y luego dice que si lo hará... pero no sera mi
culpa, ¿me quiere volver loca señor morado?
-Llamare a la enfermera para que te
prepare.
-…Si señor Morado, tiene mucha razón... creo que es
mejor que me encierre antes que mate a mucha gente... incluyéndolo a usted.
